¿Vale la pena reformar una vivienda antes de venderla?

reformar vivienda

Sabemos que vender una vivienda no es tarea fácil y que no hacer bien las cosas puede hacer que el proceso se alargue mucho más y se termine complicando más de lo que nos gustaría. Pero, ¿podemos nosotros hacer algo para agilizar este proceso?

¿Es rentable reformar la vivienda antes de venderla?

No hay una respuesta clara, esto dependerá mucho de la vivienda, de la zona y de otros factores. Pero es cierto que puede ayudar mucho a poder venderla antes. Siempre que pensamos en reformarla es para poder disfrutarla nosotros, no para que lo hagan otros, pero esto te puede ayudar mucho en la venta de la vivienda. Hay que verlo como lo que es, una inversión.

¿Qué es lo que más valoran los españoles a la hora de elegir vivienda?

Sin contar con la ubicación, que es el factor principal clave para elegir vivienda, la lista sería la siguiente:

  1. Luminosidad de la vivienda
  2. Una cocina espaciosa y en buen estado
  3. Eficiencia energética
  4. Nuevas tecnologías y domótica
  5. Zonas comunes: piscina, pistas deportivas…
  6. Baños amplios y en buen estado

¿Cuáles son los efectos de una reforma sobre el precio de un inmueble?

Recogiendo datos de diferentes estudios, una vivienda reformada puede revalorizarse tanto como para llegar hasta al 50%, traduciéndose así en una rentabilidad de hasta el 14% para el vendedor. Además del valor económico, también ayudará a vender antes el inmueble, ya que resultará más atractivo y es más probable que encuentre nuevo propietario antes.

Reforma menor o “home staging” 

También existe una alternativa a la reforma integral, más adecuada para situaciones donde una reforma completa de la casa no compensa la inversión necesaria. Esto sería como darle un lavado de cara al hogar, cambiar su apariencia para que resulte más llamativa para posibles compradores.

El objetivo del home staging es convertir una vivienda en apetecible sin invertir demasiado dinero, poder venderla en menos tiempo y a un mayor precio.

Esto puede consistir en quitar muebles innecesarios y anticuados, pintar las paredes de un color más neutro o sustituir la decoración por una más impersonal para que la persona que la vea pueda verse viviendo en ella.

La compra de una casa tiene un gran componente psicológico y las primeras impresiones condicionarán la percepción del resto de la casa y su precio.

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